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Corazón azul

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Contra la trata de mujeres

No Somos Nadie

jueves, 27 de noviembre de 2008
De buena mañana acudí al programa de M80 “No Somos Nadie” presentado por Celia Montalbán y su troupe. Allí me hicieron pasar un buen rato, con una entrevista distendida y llena de buen humor, que falta nos hace... Creo que les sorprendió como puedo seguir hablando de algo tan apasionante para mí como es la política a pesar de tener como fondo la música electoral del PP. Me habían advertido que si me pasaba, esto es, si me ponía político, la tarara del PP me dejaría fuera de juego y me callaría automáticamente. Pero no fue así, y es que, como les conté en antena, cada vez que oigo ese estribillo del PP me motivo y recuerdo que sigue existiendo en este país una derecha muy conservadora y antigua y una izquierda. Eso sí, aparte de mi insistencia, reconozco que donde esté “defender la alegría” allí me van encontrar. En fin, todo muy bien, lo que me dejó bien motivado para el resto del día, aunque no pude quedarme para conocer como acabó el intento de Fox de robarle a Cárdenas el Premio Ondas. Otra vez será...

Les dejo la entrevista para aquellos que quieran pasar un buen momento, porque sin duda estos chicos y chicas, que se lo curran y nos entretienen, ilustran y divierten, y esa magnífica, ágil e inteligente conductora del programa, Cecilia (que aunque de Murcia parece canaria), tienen duende, y desde aquí les deseo muchos éxitos con el programa. Un programa, espero, que más pronto que tarde se pueda oír en la Comunidad murciana, no sólo para que entre por allí el aire fresco sino para que la madre de Cecilia pueda escuchar a su queridísima hija. Y con razón.

Entrevista en M80

1 comentarios:

raquel dijo...

Buenas noches:
La verdad es que resulta increíble, pero, muy gratificante, escuchar cómo se proclaman derechos y libertades en voz alta y clara, y digo increíble, porque ya les gustaría a otros países contar con un gobierno como el que actualmente tenemos en España, y digo increíble, porque ya era hora que se pudiese llamar a las cosas por su nombre sin tener que disculparse por ello, y digo increíble, porque es un auténtico placer despertarse de ese sueño y comprobar que es absolutamente cierto, más cierto que nunca, pero además yo creo que ese sueño no ha hecho más que empezar, porque sus efectos a largo plazo aportarán a la sociedad española, sirviendo de ejemplo al resto, una sobredosis de respeto a la diversidad de lo más enriquecedora; creo que es desde el respeto a lo diferente por donde empieza todo. Me gustaría, si me lo permites, felicitarte, Pedro, por ser tal y como eres.