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jueves, 7 de mayo de 2009

Este es el lema del XI Congreso Estatal de Trabajo Social que se está celebrando en Zaragoza y en cuya inauguración tuve el honor de participar junto a la Ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez.

En estos momentos de crisis mundial es clave el reconocimiento de los derechos sociales como derechos universales, y la apuesta por el derecho de ciudadanía plena y social, derechos que forman parte de la continua construcción del Estado del Bienestar. Durante tres días, más de 1.300 profesionales del Trabajo Social analizan su función en la sociedad en tiempos de crisis, donde el gran desafío es ampliar las prestaciones sociales a la ciudadanía para superar el modelo ultraliberal fracasado, un modelo defendido aún por el Partido Popular. Por este motivo, para el Presidente Zapatero la política social es una prioridad, como lo demuestra el hecho de que más de la mitad de los Presupuestos Generales del Estado está comprometido con la inversión social, que es la mejor manera de evitar la exclusión y procurar la inclusión y la cobertura para los más necesitados.

Este compromiso del Gobierno de España con las políticas sociales y con la ciudadanía queda reflejado igualmente con la puesta en marcha de uno de sus proyectos de mayor envergadura, esto es, el desarrollo del Sistema Nacional y Público de la Dependencia, que reconoce un nuevo derecho subjetivo y universal, aunque todavía queda mucho por desarrollar y consolidar de este nuevo derecho social, sobre todo si tenemos en cuenta la actitud obstruccionista que han demostrado determinadas Comunidades Autónomas gobernadas por el PP.

Debemos reconocer la universalización de los servicios sociales como cuarto pilar del Estado del Bienestar que son y, para conseguirlo, tenemos que trabajar y luchar por el avance de estos derechos. Por ello, el papel de las trabajadoras y trabajadores sociales, en un momento de crisis económica como el actual, es primordial porque como dijo Trinidad Jiménez en la inauguración del Congreso “son ellas y ellos los actores de las políticas sociales y quienes han de atender con mayor intensidad a los sectores más vulnerables de la sociedad, porque son ellos los que, a través de su experiencia en el contacto directo con la ciudadanía, nos van a dar una señal más clara y enriquecedora de cómo tenemos que encauzar nuestras políticas sociales”.

El Consejo General de Colegios Oficiales de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales quiere con este XI Congreso plantear la necesidad de que el trabajo social se adapte a los nuevos retos que la sociedad plantea, principalmente en momentos en los que su labor se hace aún más necesaria.

5 comentarios:

Nacho Meneses dijo...

Hola, Pedro. Coincido contigo en la indudable importancia de un desarrollo adecuado de la llamada Ley de Dependencia, el cuarto pilar del estado de bienestar. Pero, como a tí, me preocupa la situación en aquellas comunidades gobernadas por el PP, que han mantenido una actitud abiertamente obstruccionista, despreciando el espíritu de la ley y a aquellos que necesitan más ayuda. Te querría preguntar, si sabes, cuál es la situación actual de desarrollo de la ley, y un poquito más de detalle en dónde y cómo se produce ese obstruccionismo por parte del PP.

Gracias y un caluroso saludo desde Chamartín.

Nacho Meneses

Anónimo dijo...

Querido Pedro, sentí no poder acompañaros en Zaragoza, pero se que estuviste muy bien y me gusta que la Ministra estuviera, seguro que a su madre (Asistente Social) tambien le gustó.
Me parece bien que matices que el cuarto pilar del Estado de Bienestar son los Servicios Sociales.

Aida Esther Pérez Lorenzo dijo...

Seguidora de tu blog desde Tenerife, soy Trabajadora Social y trabajo en el sector de la salud. Tuve y no la quiero perder, mucha ilusión con esta nueva ley como un pilar más dentro de las prestaciones del Instituto Nacional de la Seguridad Social, pero finalmente, tal como dices, cada comunidad la está gestionando como "le viene en gana", pues si bien la ley es clara en cuanto a derecho y prestaciones, lo cierto es que la gente sigue esperando y muchas veces muere, esperando a ser valorada o aún reconocidos sus derechos, esperando a que las prestaciones se hagan efectivas. Es lamentable y realmente muy frustrante para Trabajadoras Sociales como yo, que llevamos muchos años parcheando y dando la cara mientras el dinero se pierde no sabe bien dónde. Canarias gobernada por la alianza entre PP y CC, va siempre en el vagón de la cola, pero realmente lo que pienso es que desde el Estado no sólo hay que financiar, sino también inspeccionar o supervisar y hacer que las leyes se cumplan. Los congresos sirven de muy poco mientras esta realidad no cambie, pues los excluídos seguirán esperando y padeciendo mientras se gestionan por tiempo indefinido sus derechos.
http://aidaestherperezlorenzo.blogspot.com/

raquel dijo...

¡Hola!
Despido la semana una vez más, acercándome a este blog que se ha convertido en un referente para mí, por lo que se trata y cómo se trata; es cierto que en medio de tanta confusión, leer algo capaz de aportarte un poco de sosiego es de agradecer; creo que el sentido y los sentidos a los que te refieres sean el sentido de la inquietud y los sentidos todos y cada uno en alerta sin más alto en el camino que para respirar profundamente y tratar de encauzar lo acontecido hacia el mejor de los rumbos, un rumbo hacia donde todos podemos y debemos dirigirnos para contribuir al bienestar social de quien nos rodea, y muy especialmente de quienes más lo necesitan; la labor realizada por los trabajadores sociales resulta encomiable y ciertamente decisiva como para no contar con todo el apoyo que debiera; no hay nada capaz de aportarte mayor satisfacción personal que cuando te sientes de alguna forma, sin importar cuál sea, útil para con la sociedad, todos somos necesarios, absolutamente todos.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

HOla Pedro, yo tuve la suerte de oirte en el congreso de los trabajadores sociales en Zaragoza. Tu discuso fue emocionante, ya que con pasión recordastes que el cuarto pilar del estado de bienesatar son los servicios sociales y no la ley de dependencia y que en tiempo de crisis las políticas sociales son fundamentales. Poco a poco tenemos que crear marea de sentidos que nos den sentido de política social y no política neoliberal. Un abrazo de socialismo afectivo. Gracias por tu labor.Manuel