Hoy es 25 de noviembre, día internacional contra la violencia de género, contra la violencia machista, contra el terrorismo doméstico... Hace ya 5 años que entró en vigor la Ley Integral de Medidas Urgentes contra la Violencia de Género, una legislación que ha conseguido que la sociedad se haya mentalizado contra estos crímenes. Ha sido, pues, una Ley que ha demostrado ser un instrumento realmente eficaz. Pero tenemos que seguir trabajando para eliminar totalmente esta lacra y, como ya he dicho en distintas ocasiones, los hombres debemos ser parte de la solución, no del problema. Todos los hombres tenemos que reprobar las actitudes machistas en el día a día, todos los hombres tenemos que tener una actitud positiva hacia la igualdad en plenitud y paridad de las mujeres, todos los hombres tenemos que entender bien que las mujeres que son discriminadas o mueren a manos de sus parejas, ex parejas, maridos o amigos no son otras que nuestras madres, hermanas, amigas o compañeras de trabajo. Tenemos, también, que seguir trabajando por desterrar mensajes que todavía se encuentran eco en muchas familias, en medios de comunicación, publicidad, televisión, videojuegos... mensajes donde se nos muestran a mujeres incapaces, mensajes que las denigran por el solo hecho de ser mujeres, mensajes que las desprecian y anulan. Por todo ello debemos apostar por una Educación para la Ciudadanía, una educación en valores democráticos, de igualdad y respeto; una educación que se desarrolle no sólo en las aulas sino también en el seno familiar, una educación encaminada a terminar con la violencia de género, a terminar con los roles de la desigualdad. Con ello debemos conseguir que nuestra juventud entienda el respeto, la igualdad y la dignidad de todas las mujeres.
Animo, sobre todo a los hombres, para que acudan a las manifestaciones y concentraciones que se desarrollan en todas las ciudades de España para gritar junto a las mujeres ¡Basta ya! En Madrid la concentración será en la Puerta del Sol a las 19:00 horas, allí los espero.
Hago mío el eslogan de la campaña del Ministerio de Igualdad que bajo el titulo Maltrato Zero dice: “De todas las mujeres que haya en mi vida, ninguna será menos que yo”.
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6 comentarios:
Aisssssss, Pedro, si es que vamos para atrás como los cangrejos!
En eso, en tantas cosas!
Hablando de violencia contra la mujer, te invito que entres al blog que hice especialmente para contar mi caso, lo estoy haciendo con lujos de detalles y acreditando todo lo que afirmo, INCREÍBLE, PERO REAL.
Entra y divúlgalo, por el bien de miles de personas.
www.laverdadbuscalaluz.blogspot.com
Un saludo,
Graciela.
YA BASTA.
"De todas las mujeres que haya en mi vida, ninguna será menos que yo".
"De todos los hombres que haya en mi vida, ninguno será menos que yo".
El tratamiento de este asunto, desde la debida seriedad que merece, ciertamente ha llegado con bastante retraso a nuestra sociedad, una sociedad marcadamente machista la mires por donde la mires y la mires como la mires, quienes hemos tenido el privilegio de nacer en democracia no hemos escapado ante la imposición de gran cantidad de ideas que conforman un auténtico ideario de normas, criterios y todo tipo de prejuicios que si encima vives en una zona practicamente rural, te obligan a salir corriendo lo antes posible, lo que quiero decir, es que la violencia machista es una cuestión de un modelo social preestablecido y reforzado a lo largo de los siglos donde la mujer ha quedado relegada a un rotundo segundo plano de obediencia, sumisión y silencio, y cuando gracias al esfuerzo imparable de tantas personas, mujeres, pero también hombres, se han ido suavizando, matizando y finalmente aclarando conceptos, entonces, se han sucedido esos trágicos finales, en el peor de los casos, a los que hemos podido asistir, pues, aceptar esos cambios, digerirlos y aprender a convivir con ellos, no les resulta nada fácil a muchos; las mujeres debemos seguir luchando, alzando la voz, reivindicando la igualdad de oportunidades y nuestro derecho a vivir nuestras vidas en libertad desde nuestra condición femenina, desglosando todas y cada una de sus características sin ningún tipo de prejuicios.
Resulta absolutamente determinante el correcto funcionamiento de los cuerpos de seguridad respectivos y la justicia para tratar con éxito realmente efectivo estos casos donde la violencia es absoluta protagonista.
Así mismo, me gustaría como prueba del machismo que impera en nuestra sociedad, señalar el uso despectivo que se hace en el lenguaje coloquial a la hora de insultar o mostrar rechazo frente a alguien o algo, sirviéndose de la condición femenina, y que con tu permiso quisiera poner de ejemplo:
-hijo de p...
-coñ...
-putada
y el desprecio hacia los homosexuales viene igualmente del rechazo a la aceptación de formas y gestos femeninos en el comportamiento masculino, por ejemplo:
-maricón
-afeminado
todos estos términos siguen sonando y quienes nos consideramos defensores de la libertad y la democracia, no podemos consentirlo bajo ningún concepto.
¡YA BASTA!
Si pero además, como decía Amelia Valcárcel: el machismo mata, empobrece y atonta. Los hombres debemos salir de la barbarie, unos, o de la pasividad acomodaticia que nos inculpa a otros, y unirnos al proyecto de sociedad que tienen entre manos muchas mujeres cuya revolución no pretende nada que no sea de justicia. Se están dando pasos importantes y la Ley va por delante, pero la educación (coeducación) es fundamental. No obstante, todo cuanto tiene que ver con la socialización es lento. Por eso la implicación masculina es necesaria y fundamental, no debiéramos sentirnos generosos en la causa abierta hacia la igualdad, al contrario, deberíamos tomar más partido desde la iniciativa propia si queremos construir y formar parte de comunidades igualitarias, ricas en valores donde la discriminación, entre ellas, por razón de género sea algo del pasado.
Para mí ha sido muy triste saber, en un día donde se han manejado muchas cifras sobre violencia de género que hay un repunte machista desde la población más joven. ¿Qué está fallando? ¿Que transmitimos a las generaciones futuras?. Todos censuramos y pontificamos con cada muerte de mujeres que muchas veces han tenido que pasar por la rueda de Santa Catalina (25 de noviembre) y sin embargo no cuaje en la conciencia social y colectiva que existe una raíz estructural desde la histórica desigualdad en las relaciones de poder entre los géneros; con la consideración de inferioridad de lo femenino frente a lo masculino. "De esos polvos, estos lodos". Por eso, seamos escrupulosos en los mensajes machistas y sexistas que emitimos porque a la postre estaremos contribuyendo a la erradicación del escandaloso número de mujeres muertas; estaremos colaborando al enriquecimiento y desembrutecimiento del mundo en el que nos ha tocado vivir.
Reinterpretemos juntos el concepto de ciudadanía.
Desde mi humilde trabajo hago lo posible para erradicar esa violencia machista de la que hablas. Pero, perdona que insista, haced algo: el gobierno y el grupo socialista para parar las ejecuciones de homosexuales en Irán. Gracias. No hagas, Pedro, que mi admiración por ti decaiga.
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